El pasado 23 de octubre fue la emisión del último episodio de la primera temporada de La casa del Dragón, serie basada en la novela Fuego y sangre de George R. R. Martin. A pesar del gran éxito que logró alcanzar en la audiencia, hubo un grupo de seguidores que no dudaron en criticar la producción debido a la falta de fidelidad con el material original. Por ello, en una reciente conversación con Neil Gaiman, ambos autores no dudaron en tocar el tema de las adaptaciones de los libros al cine y a la televisión.
George R. R. Martin y Neil Gaiman han logrado una posición importante dentro de la literatura, especialmente en el género fantástico, la ciencia ficción, e incluso del cómic. Esto se debe principalmente a las adaptaciones cinematográficas y televisivas de sus obras. En el caso del primero, están la película y la serie Nightflyers, y la saga de Juego de tronos. Mientras que, en el caso del segundo, se encuentran las producciones que se han llevado a la pantalla grande como Coraline y la puerta secreta, El misterio de la estrella y Cómo enamorar a una chica punk; así también como las que se han hecho para la televisión como American Gods, Good Omens o The Sandman.
Estos escritores deben haber encontrado una gran oportunidad en Hollywood para ganar más reconocimiento. Sin embargo, no han dudado en expresar su malestar cuando ven que sus personajes y la historia cambian. Por ello ambos están de acuerdo en que las adaptaciones deben ser fieles, o por lo menos que ofrezcan un cambio legítimo.
La adaptación de la discordia
Recientemente, George R. R. Martín y Neil Gaiman mantuvieron una conversación sobre sus respectivas carreras en la industria de Hollywood. Es así que, poco a poco, fueron llegando al tema de las infidelidades a los libros. Esta ha afectado no solo a sus seguidores, sino también a los mismos escritores debido a que hay productores que quieren interpretar el material a su manera. Tal como manifiesta Gaiman, tuvo que batallar por treinta años con personas que querían «hacer suya» a The Sandman, sin siquiera haber leído el cómic en su totalidad.
A medida que avanzaba la conversación, ambos acordaron que hay adaptaciones que deshonran el producto original. Aunque, por su parte, Martin afirmó que hay cambios que son legítimos. Sin embargo, el autor hizo hincapié en los cambios innecesarios como las variaciones de nombres, o el empleo de una escenografía que no esté acorde a lo que está escrito en los libros. Es por ello que el fracaso de la última temporada de Juego de tronos es una prueba de que es importante ser fiel a la fuente, especialmente cuando los guionistas no tienen la capacidad del escritor.
Actualmente, Martin tiene un papel activo en la producción de La casa del Dragón, por lo que cualquier cambio que difiera del material original es criticado por la comunidad de seguidores de Juego de tronos. Se ha debatido desde la ausencia de Lady Stoneheart, hasta el final del octavo episodio de la nueva serie. Contrario a ello, la adaptación de The Sandman ha sido más fiel a los cómics originales debido a que Neil Gaiman asumió un papel directo como productor ejecutivo.