Si este Halloween estás planeando quedarte en casa, puedes sentir el verdadero terror de la fecha leyendo cualquiera de estos libros.
Escribir terror es uno de los retos más grandes que puede tener un escritor en la actualidad. Con tantas plataformas de contenido, las películas de miedo pueden sobrepasar fácilmente cualquier intento de transmitir la inseguridad y el rechazo que una simple descripción de asesinatos, almas en pena, monstruos deformados o casas embrujadas. Pero en la historia de la literatura ha habido, y sigue habiendo, maestros en causar miedo, adrenalina y retratar sus peores pesadillas con palabras.
A continuación, te presentamos algunos de los mejores relatos de terror, tanto clásicos como contemporáneos. Aunque son de distintas épocas y lugares geográficos, los vincula el poder combinar elementos clásicos del terror con los horrores de la vida cotidiana.
El extraño caso de Dr. Jekyll y Mr. Hyde, de Robert Louis Stevenson (1886)
El doctor Henry Jekyll crea una poción que puede separar las partes más bondadosas de las más terribles de una persona. Cuando el doctor la bebe, se convierte en Edward Hyde, un criminal capaz de cualquier acto cruel y espantoso. Esta novela se ha convertido en un símbolo de la cultura occidental sobre el conflicto interior del ser humano entre el bien y el mal, y una precursora en mostrar lo que ahora conocemos como trastorno disociativo de la identidad.
Frankenstein o el Prometeo moderno, de Mary Shelley (1816)
Se dice que, a partir de este libro, Mary Shelley inauguró el género gótico y de terror. El doctor Frankenstein decide jugar a ser Dios y crea a un ser vivo. Pero este, como se trata de partes sumadas de varios cuerpos, es un auténtico monstruo y, lo peor de todo, tiene libre albedrío. Mientras Frankenstein se aterroriza de su creación, este ser vaga por el mundo asustando a la gente; por ello, acumula rencor contra su creador y todos los que lo rechazan. Más allá de la anécdota, la autora le dio un soplo filosófico a la obra al cuestionar la moral científica, el libre albedrío, lo que implica otorgar una vida y el enfrentamiento implícito entre el ser humano y su creador, preguntas que permiten seguir teniendo conversaciones sobre la obra y que sea leída hasta la actualidad.
It, de Stephen King (1958)
El Rey del Terror no podía menos que aparecer en esta lista. Entre sus múltiples libros de terror y suspenso, la historia del payaso secuestrador de niños es una de las más emblemáticas de la literatura de horror contemporánea. El libro no solo muestra gráficas escenas de sangre y al payaso más aterrador de la historia, sino que este reencarna los miedos personales más profundos de cada uno de los siete personajes principales, tanto en su adolescencia como 27 años después. Además de provocar terror, King aborda temas muy importantes y atemporales, como el racismo, la violencia doméstica, la dependencia emocional y los prejuicios.
El quinto hijo, de Doris Lessing (1988)
La historia se centra en un bebé llamado Ben, el quinto hijo de una pareja que vive en Inglaterra, a finales de los sesenta. A diferencia de los otros hermanos, Ben tiene un aspecto raro, un hambre insaciable y arrebatos violentos que atemorizan a toda la familia. Aparte de las situaciones de tensión que se viven en la familia debido a este hijo peligroso, Doris Lessing también explora la situación terrorífica y real de unos padres que no aceptan a su hijo tal como es, del mismo modo que hacen con aquellos que no cumplen sus expectativas y desestabilizan el tipo de vida que quieren llevar.
Cuentos malévolos, de Clemente Palma (1904)
Los cambios tecnológicos y sociales de inicios del siglo veinte influyeron fuertemente en la narrativa del hijo de Ricardo Palma. Herejes, vampiras, demonios, mujeres que se sacan ojos y esperanzas gustosamente destrozadas pueblan las páginas de esta antología de cuentos, escrita por uno de los padres del cuento peruano moderno.
Informe sobre ciegos, de Ernesto Sabato (1961)
Aunque se trata de un capítulo de la novela Sobre héroes y tumbas, puede leerse por separado sin que pierda su sentido. Fernando Vidal Olmos, el protagonista, es un hombre atormentado que vive alejado de la sociedad e inicia su propio descenso a los infiernos, convencido de que los ciegos conspiran para dominar al mundo. Para los críticos, esta sección expone la visión del escritor sobre la soledad y la búsqueda de la identidad. Por la independencia que tiene del libro original, la editorial Libros del Zorro Rojo ha publicado una edición el 2013, con ilustraciones a carboncillo por Luis Scafati.
Los peligros de fumar en la cama, de Mariana Enríquez (2009)
La escritora argentina trae al movimiento del siglo veintiuno todos los elementos del terror clásicos, como las brujas, apariciones de espectros y muertos que vuelven a la vida. Son relatos breves y tienen todos los otros elementos de miedo de nuestros tiempos, e indagan en el terror que se oculta en lo cotidiano.