A sus 86 años, Mario Vargas Llosa se ha convertido en el primer escritor en lengua española en formar parte de la Academia Francesa. En noviembre de 2022, se dio a conocer que el Nobel de Literatura ocuparía el sillón número 18, ocupado anteriormente por el filósofo Michel Serres y el pensador Alexis de Tocqueville. Cabe resaltar que Vargas Llosa es miembro de la Real Academia de la Lengua desde el año 1994.
Foto de portada: Emmanuel Dunand
Mario Vargas Llosa ha pasado a la «inmortalidad». Tras convertirse en miembro de la Academia Francesa, el Nobel de Literatura pasará a la historia como el primer escritor de habla hispana en formar parte de la institución fundada por el cardenal Richeliue en 1635. Por primera vez en la historia, la academia decidió romper sus propias reglas al condecorar a un autor que nunca ha escrito directamente en francés. La segunda regla transgredida está relacionada con la edad. De acuerdo a las normas, en el 2010 se estableció que los candidatos deben tener como máximo 75 años para poder convertirse en uno de los «inmortales», nombre con el que se reconoce a los académicos.
Desde noviembre del año pasado, cuando se dio a conocer que Mario Vargas Llosa ocuparía el sillón número 18, diversos intelectuales criticaron su designación. Sin embargo, Hélène Carrère d’Encausse, secretaria permanente de la Academia Francesa, ha destacado que el escritor hispano-peruano «ha ayudado a la cultura francesa más que muchos escritores franceses». Por su parte Jean-Marie Rouart, quien ocupa el sillón número 26 desde 1997, aseguró que el autor «es alguien que tiene vínculo profundo con Francia y la Academia ha hecho una excepción». También, añadió que «cuando un gran escritor entra en la Academia es siempre un símbolo». Además, es importante resaltar que Vargas Llosa es un francófilo declarado. Ha escrito un ensayo sobre Gustave Flaubert titulado La orgía perpetua: Flaubert y Madame Bovary.
Bienvenida a la «inmortalidad»
Este 9 de febrero, se llevó a cabo la ceremonia en la que la Academia Francesa da la bienvenida oficial a Mario Vargas Llosa. Vestido con el tradicional uniforme verde, el escritor dio su discurso, hizo un recorrido de su pasión por la literatura francesa y que, como miembro de esta institución, velará por la lengua de dicho país. Cabe resaltar que la relación entre Vargas Llosa y la cultura francesa comenzó durante la infancia del autor, siendo Alejandro Dumas y Julio Verne los que le abrieron la curiosidad por la lectura. A comienzos de su oratoria, recordó la anécdota al llegar por primera vez al país galo: el momento cuando compró un ejemplar de Madame Bovary en una librería desparecida del Barrio Latino. Asimismo, le agradeció a Francia por ayudarlo a sentirse «un escritor peruano y latinoamericano», y permitirle descubrir la otra cara de América Latina.
Esta no es la primera distinción que recibe el escritor. Además de haber sido galardonado con el Premio Nobel de Literatura en 2010, en años anteriores fue reconocido con el Príncipe de Asturias de las Letras, el Biblioteca Breve, el Rómulo Gallegos y el Planeta.