La redacción dentro del mundo digital es de mucha utilidad cuando buscamos dar a conocer nuestra marca y potenciar la comunicación dentro nuestro ecosistema digital.
Con la presencia del internet cada vez más presente en nuestra vida cotidiana, hemos empezado a centrar nuestras expectativas de crecimiento laboral y profesional en el mundo digital. Desde el vecino que ha iniciado un emprendimiento con su familia hasta las enormes compañías multinacionales, todos nos hemos visto en la necesidad de crear un ambiente donde podamos relacionarnos y que nos permita mostrar nuestra marca al público. A este ambiente, donde se agrupan redes sociales, páginas webs y servicios de mensajería como WhatsApp, se le conoce como ecosistema digital.
En esencia, un ecosistema digital fomenta las oportunidades de crecimiento de nuestra marca y genera tácticas que optimizan el servicio de atención al cliente. Por ello, es necesario saber cómo comunicarnos en cada uno de los espacios del ecosistema digital que estamos formando. Durante su creación es vital conocer todas las limitaciones y oportunidades que nos ofrecen los espacios en los que se desenvuelve nuestra marca.
Cada canal de comunicación que usamos tiene su propio lenguaje y es aquí donde debemos tomar conciencia de cómo nos expresamos en nuestra redacción. Twitter y Facebook nos ofrecen oportunidades únicas, pero también limitaciones propias de la naturaleza de cada una de estas redes sociales; si bien en Facebook se puede escribir más y poner imágenes, el público necesita un balance correcto de ambos o el producto no resaltará entre los otros miles alrededor. En Twitter, el límite de caracteres implica el manejo de una economía de lenguaje particular, así como un lenguaje que resulte fácil de captar. De igual manera, el público de Instagram es mucho más visual, por lo que es más útil que nuestro texto se presente dentro de una imagen (o un conjunto de ellas), y sea directo y breve. Si bien podemos usar la caja de descripción para brindar una información más completa, no tiene tanta visibilidad como la imagen.
Algo diferente sucede en los chats. No solo importa que respondamos rápido y seamos claros en nuestra redacción, también debemos transmitir simpatía y confianza con nuestras palabras. De esta forma, quienes se acercan no solo estarán complacidos por un buen trato, sino que nos recomendarán con otras personas.
Otra forma de aprovechar la redacción dentro de nuestro ecosistema digital está en la creación de guiones para videos. Esto es algo que saben muy bien los creadores de contenidos audiovisuales. En el producto final lo que brilla es la calidad de edición o los efectos usan para llamar nuestra atención como público, pero en el proceso de creación de sus contenidos ellos necesitan una trama que seguir, un hilo que les de el inicio y el final, sin temor a salirse por otros temas o quedarse en blanco a mitad de la grabación.
Como hemos visto, la redacción cumple un papel muy importante dentro del ecosistema digital que estamos diseñando y su uso depende de diversos factores: la cantidad de caracteres, la visibilización que tiene el espacio que se le asigna, la personalidad que tiene nuestra marca e, incluso, si se verá directamente o será la base para otra clase de contenido.