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Teatro para todos: «Migrantes», una obra familiar y diversa

Un novedoso proyecto sobre las tablas del teatro peruano. Migrantes, basada en el libro homónimo de Issa Watanabe (hija del poeta José Watanabe) presenta una pieza en la confluyen la muerte, la esperanza y la familia como centro del desplazamiento. Claudia Rentería, directora de la obra, nos presenta más detalles en la siguiente entrevista.

Migrantes es una apuesta bastante sui generis y diversa. Quisiera preguntarte cómo se concibió y la forma en que llegó a las tablas nacionales.  

Nosotros empezamos este proceso como parte de un laboratorio generado en el 2022 por Idea Internacional, organización que ve temas de democracia y arte en general. Me convocaron a mí para que sea la asistenta de dirección y monitora del grupo que iba a trabajar en temas de discapacidad. Se hizo la convocatoria, postularon artistas de escuelas como La Católica, artistas independientes, entre otros, para generar un producto que vincule la discapacidad y la democracia. Sin embargo, la iniciativa fue variando, debido a que Ana Correa, que era la directora general del proyecto, nos trajo este insumo, que es la obra Migrantes, de Issa Watanabe, para poder explorar temas de diversidad mediante la figura de los animales. Han pasado varias personas, pero se quedaron los compañeros neurodivergentes. Por ejemplo, en la construcción del puma, personaje interpretado por un actor autista, hay algunas similitudes con su historia o con características que comparten las personas dentro del espectro. No solamente están puestas y actuadas, sino también representadas debidamente por un actor autista, a diferencia de otras ficciones. Así iniciamos un proceso de exploración para encontrar las similitudes de los animalitos con nosotros mismos, generándose esta obra que luego postulamos a un programa de mentorías con el Británico Cultural, Capaz y el British Council. De hecho hemos compartido en un festival con ellos. Nuestro elenco es bastante informado y consciente del impacto que genera el producto artístico que ellos hacen

¿Han presentado la obra en otras regiones del país?

Con Idea presentamos la obra en la ciudad de Cusco. Allí tuvimos también talleres, algunos en los que yo he dictado tanto a activistas como a creadores que les interesa trabajar estos temas de diversidad o con elencos diversos como el nuestro.

El migrante está pensado como una persona distinta al otro. Sabemos que el concepto de migrante es aquella persona que se desplaza de un lugar a otro, pero aquí estamos lo enfocamos desde la perspectiva del otro como un ser distinto, lo que nos coloca frente a la diversidad de plano.

En el libro cada animal es distinto y están mezclados. Sin embargo, todos viajan juntos: mamíferos, anfibios, herbívoros, carnívoros. Todos están en la misma situación y eso también hace que se generen familias en el camino. Por ejemplo, tenemos un personaje, Mamá Jabalí, que tiene un bebé rana. Esas son cosas que pasan en el proceso de migración, a veces hay niños que viajan solos y encuentran figuras maternas o paternas en el camino, a pesar de que no son sus familiares directos. Esa es la propuesta de Issa Watanabe y la tuvimos muy en cuenta. Además, vemos a los animales bajo una visión de diversidad funcional. Sabemos que un puma tiene una sensibilidad distinta a la de una vicuña. El primero puede ser más sensible a los sonidos o estar más alerta a las cosas. En cambio, la vicuña puede ser un animal más calmado. Dentro del proceso hemos tenido compañeros con diversidad física que ya no están porque el elenco se ha ido renovando por temas de cada uno. Ese fue el caso de nuestro compañero Erick, quien tenía una discapacidad motriz. Encarnaba a un pato negro y salvaje que tenía un movimiento tembloroso que afectaba a su vida cotidiana. Esas cualidades las adaptamos a los personajes y trabajamos de acuerdo con el cuerpo, la energía y la diversidad de cada uno. Esto es lo que permiten proyectos con enfoques de accesibilidad. La diversidad representa el pilar de nuestra iniciativa y es un espacio donde cada actor puede construir a su personaje.

Y en ese sentido, Claudia, ¿has encontrado algunos obstáculos para el tema de la puesta en escena de Migrantes? Es decir, falta de apoyo, la falta de accesibilidad en los teatros.

Desde las instituciones aliadas que han generado espacios para este proyecto hemos encontrado apoyos y ajustes que se han ido construyendo y afianzando con el tiempo. Para hablar del caso de hipersensibilidad a los estímulos como luces o sonido. En el elenco tenemos a una actriz que tiene esa sensibilidad hacia las luces del teatro, y no lo sabía porque, como es está en proceso de formación, nunca se había enfrentado a una sala como la del Lugar de la Memoria, donde trabajamos la primera temporada. Se hiperestimuló y tuvo un momento de crisis que lo supo manejar, apoyada por todos nosotros y por los equipos de Idea y del Lugar de la Memoria. Por eso, ahora tenemos una hoja de ruta que nos señala todos los requerimientos que necesitamos. Los volúmenes se prueban al mínimo y las luces jamás pasan el nivel medio de intensidad. En realidad, dentro de lo que hemos podido controlar, tuvimos apoyo para las funciones adaptadas. Sin embargo, hay cosas que están fuera de nuestro alcance. En el caso de Cusco, es una ciudad con una arquitectura bastante inaccesible. Una vez presentamos la obra en un auditorio municipal que estaba en un tercer piso y teníamos a una actriz en silla de ruedas. Ella, viendo la forma de seguir con la agenda, aceptó ser cargada para llegar hasta el auditorio, por lo que se pudo continuar con el trabajo. Si en Lima es difícil, en provincia es muchísimo peor. Disposición hay, pero existen barreras.

El hecho de trabajar con artistas con diversas capacidades y habilidades, ¿ha supuesto un reto?

Creo que el reto es generar un proyecto cultural independiente en el Perú. Cualquier emprendimiento de este tipo es difícil por un tema de apoyo, pero que haya supuesto un reto trabajar con personas con discapacidad, no. Ese es el término correcto, porque hablar de capacidades o habilidades especiales guarda una cierta condescendencia que no es necesaria. La discapacidad no es algo malo, sino que es una situación que se genera cuando se encuentra la diversidad funcional con la barrera del ambiente. No es que para mí sea una carga hacer estas cosas, pues me considero una persona con discapacidad psicosocial. Yo he tenido depresión infantil y sufro de ansiedad crónica, por lo que he requerido de ciertos ajustes para poder realizar mis actividades y ejercer mis derechos al trabajo y al estudio. Mucha gente no sabe que las personas usuarias del servicio de salud mental pertenecen también al espectro de la discapacidad psicosocial. El enfoque que tenemos de la discapacidad es el que está ligado al tema de los derechos. Como artistas, hemos encontrado una forma de construir en base a una perspectiva de la horizontalidad. Todos nos sostenemos en base a la empatía que hemos generado.

La obra cuenta también con herramientas de accesibilidad de infancias neurodivergentes. Es decir, es un producto pensado para el tema de la diversidad, al cual podríamos atribuirle una característica pionera en el país.

De hecho, ya ha habido espectáculos que han implementado el mecanismo de la función relajada, cuyo símbolo es la letra R. Esta herramienta se utilizó durante la obra Los amigos al otro lado de mi puerta, también generado por La Hipérbole, que es la productora que nos está apoyando en temas de comunicación y también, dentro de la Red de Cultura Accesible, iniciativa que se hace desde Capaz, el Británico, el Gobierno Español y el teatro La Plaza. A la interna se dieron funciones relajadas y previos testeos de productos culturales también. Pero, todavía no se difunde tanto como esperamos, porque es un proceso de crecimiento.

Háblanos un poco más acerca de las funciones relajadas…

Contempla un entorno más relajado para personas que necesiten un ambiente menos restrictivo en el teatro, tomando en cuenta su sensorialidad. Dentro de la obra hay sonidos bajos, luces bajas, lo cual genera una atmósfera amable para un público neurodivergente y para el mismo elenco. Es nuestra intención generar productos creados por personas con discapacidad, pues genera un tema de representación. Dentro del proyecto estamos próximos a realizar testeos para que la obra se accesible para personas con discapacidad visual y auditiva. De hecho, la obra tiene un gran potencial entre el público con discapacidad auditiva, ya que no hay diálogos y todas las acciones son físicas. Sin embargo, falta ajustar el tema de la transmisión de la información por los canales para las personas sordas. Por otro lado, queremos que este proyecto siga y hacer testeos con otras herramientas, con el objetivo de que muchos ejerzan sus derechos culturales, pues, en realidad, las personas con discapacidad se topan con muchas barreras en los cines, en los museos o en los teatros.

Por favor, invita a nuestros lectores a acudir al teatro a ver esta interesante obra, que estamos seguros marcará un hito.

A todos los lectores, los invitamos a apreciar Migrantes en el Centro Cultural Ricardo Palma de Miraflores, este fin de semana a las 3 de la tarde, un horario familiar. Este domingo 27 de agosto tendremos la función relajada para personas que tienen una percepción sensorial distinta. Ese día contaremos con zona de calma, para que las personas que lo necesiten puedan regularse. Las entradas están a la venta a través del portal www.lahiperbole.com a través de un formulario y en la boletería del teatro a partir de las 2:00 p.m. Los esperamos, vengan con la familia, es una obra muy linda que habla sobre temas de migración y las despedidas, pero desde una perspectiva muy dulce y sensible. Como siempre digo, esta es la obra que me hubiese gustado ver de niña, pues muestra temas que antes eran tabú.

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